martes, 14 de septiembre de 2010

Seis cosas que quizá piensas de las pajas y que no son verdad

Me presento ante todo; soy Monroe, hombre, hetero, 28 años. En relación estable y conviviendo con Megachix, otra de las colaboradoras del blog.

Para arrancar mis colaboraciones a LCLLCLM, voy a empezar por abajo, por revisar unas cuantas observaciones respecto a la percepción que muchos adolescentes, yo incluido durante determinados momentos de mi vida, tienen en lo referente a masturbarse, que además resuenan como posibles razones por las que uno querría dejar de hacerlo. Mi perspectiva es la masculina, obviamente, y también la atea, pero eso lo dejaremos para otro dia, por lo que espero ser capaz de contenerme en lo referente a la iglesia, la Biblia y el sexo. Escribo este artículo con la esperanza de que sirva para algo a chavales no necesariamente religiosos.

Y con la decepción que supone el verme a mi mismo explicando esto en pleno 2010.

1.- Es propio de la juventud

Si estás pensando en la abstinencia, déjame advertirte una cosa en la que tal vez no hayas pensado; dejar de masturbarte será una tarea que tengas que llevar a cabo durante, que se yo, cuarenta años, cincuenta o toda tu vida. No puedo asegurar cómo estará la cosa cuando cumpla 40 o 50, pero sí puedo asegurar que a mis 30 lo único que ha cambiado desde los 15 son dos cosas, mis circunstancias personales y mi forma de entender el sexo. Pero creeme, las ganas no menguan, en todo caso crecen. De modo que si eres un adolescente preocupado porque estás haciendo lo que te han hecho creer que son "cosas de adolescentes" y crees que al entrar en la vida adulta todo será más fácil, siento decirte que estás patéticamente equivocado.

Si cada vez que "caes" te sientes culpable, vete preparando para los próximos 15 años de culpabilidad, amigo.

2.- Eres el único / el que más lo hace

No. En serio.

He estado ahí, ¿vale? Lo sé. Sé lo que es pensar que eres el único de tu clase que no folla, el único que tiene caspa o el único que se toca más de "una o dos veces a la semana". Créeme, digan lo que digan tus compañeros o amigos, aquí el que menos se la menea la tiene roja. Por supuesto que piensas que lo haces demasiado, estás en la edad de ser inseguro en todo y parecer seguro de todo. Si te masturbases la mitad o el doble, pensarías de todas formas que es demasiado.

No lo es. Todo el mundo lo hace, algunos más y otros menos que tú. No es una cuestión de cantidad, es una cuestión de libertad. Pero ya hablaremos de eso con más profundidad otro día. El concepto interesante aquí y ahora es que sí, todo el mundo lo hace. Tus padres, tus tíos, tus amigos, el señor que vende el pan, el párroco, los vecinos...

3.- Es denigrante para otras personas

En mi vida, ha surgido la oportunidad y he tenido la suficiente confianza en varias ocasiones de decirle a varias chicas que me he masturbado en alguna ocasión pensando en ellas. Algunas eran mi pareja en aquel momento, y otras eran simplemente buenas o muy buenas amigas. Tras la reacción inicial, que ha dependido en cada ocasión de mi relación con ellas y del contexto de la conversación, indefectiblemente, todas se han sentido en último término halagadas. No eres un monstruo ni una mala persona, y ni las chicas a tu alrededor ni Pilar Rubio te culparían si pensasen en ello.

¿Qué decir del porno? Hace ya mucho, mucho tiempo que no es esa industria oscura y peligrosa de mafiosos, trata de blancas y chicas obligadas a hacer cosas que no quieren que nunca fue realmente y posiblemente te imaginas. Es un negocio legítimo y bastante lucrativo del que viven muchas familias honradas, y no veo por qué Jenna Haze haciendo de la canguro cachonda de tus hijos es más denigrante para una mujer o para la mujer que Julia Roberts haciendo de Vivian Ward.

4.- Es físicamente dañino

Los mitos son muchos. Que te quedas ciego, que te quedas tonto, que perjudicas tus propias posibilidades de procrear en el futuro, que a partir de tres en un día empiezas a matar neuronas como en un coma etílico...

Mentiras, mentiras y mentiras. No existe ni una sola prueba científica que avale un solo perjuicio físico que uno se pueda ocasionar masturbándose, salvos sean dos postulados; a) NADA es bueno ni en exceso ni cuando pierdes el control, y b) si te aciertas en el ojo, bueno lo que se dice bueno no es.

Más al contrario, sea que crees que Dios creó al ser humano o que la evolución creó al ser humano, lo innegable es que el ser humano fue creado para procrear a partir de la pubertad, y con el deseo constante como herramienta de perpetuación genética. Creas o no que es algo impuro, la ciencia está ahí; produces espermatozoides sin interrupción, todo el tiempo, a un ritmo básicamente constante, y el lugar al que va a parar tiene un espacio limitado. Sólo existen tres formas de expulsarlo para dejar espacio para más; el sexo, la masturbación o la emisión nocturna. De nuevo, esto es así tanto para tí como para el charcutero como para el cura; sucede y punto.

A falta de sexo, privarse a uno mismo del alivio que supone la masturbación, dejando la emisión nocturna como única opción, es ir en contra del propio cuerpo (y de tu madre que te limpia la ropa), no muy diferente de decidir no orinar hasta que terminas meándote encima. Es sencillamente antinatural, y el cuerpo reacciona en tu contra; numerosos estudios han demostrado una relación directa entre la abstinencia sexual y el nivel general de agresividad. Maldita sea, cualquiera con una vida sexual activa se da cuenta de que está insoportable en cuanto lleva algo más de lo acostumbrado sin pillar.

5.- Lo haces porque eres triste, solitario, amargado o egoísta

También falso, pero quizá el más comprensible, dado que en muchísimas ocasiones se debe a una simple reacción química.

Hacerte pajas tiene el efecto usual que cualquier tipo de clímax sexual tiene en el ser humano; un estado de relajación total diseñado para recompensarte y hacerte recordar que "esto es bueno". El problema es que si uno está haciendo algo que uno mismo considera furtivo, ilegítimo o malicioso, es muy fácil confundir esa sensación de relajación con un sentimiento de vacío, o incluso de culpabilidad. A partir de ahí, es una cuesta abajo.

Si no tienes amigos o estás amargado es porque eres insoportable, no te gusta la gente o sencillamente hueles mal, yo que se. Pero echarle la culpa a tu costumbre de hacerte una pajilla antes de dormir es a) mentira y b) un acto extremadamente cobarde. Tras masturbarte estás en tu momento más débil, y atacarte en él es como quitarle un caramelo a un niño, un acto de crueldad injustificada que no llevarías a cabo si te hubieran educado correctamente. Enfréntate a lo que quiera que te hace ser un repelente cansamonos y no le eches la culpa a algo perfectamente natural que la gente feliz también hace.

6.- Es malo o vergonzoso de por sí

Al final, el principal problema de todo esto es que nos han educado así, directa e indirectamente. A tí, a mí y a todos.

Nunca nadie nos ha dicho directa y sencillamente que masturbarse sea malo, y sin embargo, mientras no somos independientes (y en según qué casos, cuando lo somos también) todos lo hacemos a escondidas, sabiendo instintivamente que no queremos que otras personas nos vean o siquiera sepan qué es lo que estamos haciendo. ¿Alguna vez te has preguntado por qué?

Yo creo que la explicación a este fenómeno es muy sencilla; como todos los actos íntimos, tocarnos nos hace sentir vulnerables, y vivimos en una cultura en la que la debilidad se castiga. En último término, por eso es un tabú, por eso muchos no admiten hacerlo, por eso existen religiones que lo condenan (no puedes condenar el cagar, es demasiado imposible, pero esto está en el punto justo de imposibilidad) y por eso si en el instituto corre siquiera el rumor de que existe un testigo de que una vez te hiciste una paja, serás "El Pajillero" hasta tercero de carrera. Por eso tus padres no quieren pillarte haciéndolo, y por eso tú no quieres que te pillen. Tristemente, al responder a una necesidad perfectamente natural nos sentimos en cierto modo débiles y vulnerables. Es cuando logras superar, aunque sea un poco, ese hecho, cuando eres realmente libre. No poder pasar diez minutos solo sin meneartela o imponerte un fracaso cada vez que lo haces son sólo dos formas diferentes de estar esclavizado por tí mismo.

Trivia; la autoexploración, incluida una forma instintiva y simple de masturbación, es muy común entre niños de 3 a 6 años.

6 comentarios:

  1. De modo que si eres un adolescente preocupado porque estás haciendo lo que te han hecho creer que son "cosas de adolescentes" y crees que al entrar en la vida adulta todo será más fácil, siento decirte que estás patéticamente equivocado.
    Eso me ha recordado a algo que leí en una ocasión. "La adolescencia es la etapa de tu vida en la que crees que masturbarse es algo temporal. La vida adulta empieza cuando asumes que lo seguirás haciendo mientras se te levante..."

    ResponderEliminar
  2. Anda, no me había enterado del blog este. Al RSS!

    ResponderEliminar
  3. ¡Cuántas verdades para desbaratar tantas mentiras!

    Yo admito que, por ahora, no me gusta hacerlo delante de nadie. Es un poco el tema de "los padres no quieren pillarte ni tú quieres que te pillen" (por desgracia, aún no soy independiente... maldito paro...), pero supongo que en el futuro, con pareja estable, las cosas cambien. O no. O yo qué sé...

    La cuestión está en que masturbarse no es malo. Para nada. De hecho, a mí me alivia el vaciar el fusil, y ya tuve en el pasado incomodidades con la tontería de la emisión nocturna, no hay ganas de volver a ello.

    ... Vale, estáis consiguiendo que me confiese, ¿contentos? xD

    ResponderEliminar
  4. Muy bueno Monroe, como siempre un Must Read.

    ResponderEliminar
  5. Amén, hermano.

    Un inciso, de una mujer católica, por cierto.
    No he tenido educación sexual, todo lo he aprendido por cuenta propia, incluido la masturbación - de hecho, la primera vez que lo hice NO SABÍA lo que era aquello XD -. Pero nunca me he sentido ni culpable ni avergonzada por masturbarme, y de hecho soy de las pocas mujeres que conozco que siempre ha hablado sin tapujos de ello... siendo yo católica y mis amigas ateas.
    Esto no tiene que ver con la religión, tiene que ver con el sentido común ^^U

    Seguid así, que el principio promete mucho! :D

    ResponderEliminar
  6. a mi me soprende lo de que en pleno siglo 21 te sigan diciendo que con la masturbacion te pondras enfermo. Osea...evolucionemos por favor!

    ResponderEliminar